La solución para todos los problemas, cualquiera que sea, cualquiera que se imagine, es la educación. El hombre, la especie, es un animal racional que ha llegado a donde está a fuerza de luchar, de pelear, de matar a sus semejantes. Gracias a ello, los individuos actuales arrastramos una herencia genética que nos lleva a la violencia entre nosotros, entre nuestros semejantes e incluso contra los que amamos. Y esto lo hacen tanto hombres como mujeres, jóvenes y ancianos, incluso niños. Y el que diga lo contrario, miente o es demasiado fariseo para percibir la realidad. Acusar a los hombres, por tanto, de ser los únicos causantes del maltrato en el entorno de la pareja es simplificar mucho este problema y hacerle el juego a un grupo de personas que desean, digámoslo así, darle la vuelta a la tortilla del maltrato. Porque, asumámoslo, la política del Ministerio de Igualdad, tal como está planteada ahora mismo, con el acento puesto en criminalizar a un único sexo, producirá un resentimiento general, un sentimiento de revancha, una intención de llegar más allá, del todo está permitido en nombre de la mal llamada igualdad. Y las políticas que insisten en la discriminación positiva para incluir a la mujer en sectores económicos o sociales donde antes no estaban (y vice versa, que también se ven), por favor,la imagen que da es la que se resume en la frase «pobrecitas, vamos a dejarles un huequecito para que no se nos quejen demasiado». Nunca ha sido una cuestión de prohibir, de legislar, de discriminar, a un sexo u otro. Solo es una cuestión de educar. Desde ya. A todos por igual. Y acabar con esas políticas cancamuseras que no llegan a ningún lado. O si llegan a algo, es a un lugar que no queríamos conocer.
Existe mucha gente que la palabra «diferente» la traduce como «inferior», gente muy ignorante todo sea dicho. Definitivamente los hombres y las mujeres somos diferentes y eso es lo que hace que seamos complementarios el uno para el otro.
La «siniestra» (ministra) de Igualdad le gusta la publicidad y el voto fácil, y eso a mí me da más miedo…
By: Vane on noviembre 26, 2009
at 9:51 pm