Posteado por: Andrés | marzo 20, 2008

El Sentido de la Vida

El Sentido de la Vida, así, en mayúsculas, es una de las mayores incógnitas que acosa a la Humanidad. Todas las ramas del conocimiento tratan de darle respuesta más o menos razonada, aunque no consiguen aproximarse. Personalmente, soy de la opinión de que la Vida no tiene una razón de ser. Simplemente apareció y nos dio origen a nosotros, seres conscientes, como un paso más en su «viaje». Pero para el ser humano, esta pregunta es una obsesión que le ha llevado a crear religiones en torno a ella, a investigar profundamente las razones de la vida o las diferencias entre algo vivo y algo que no lo está. La conclusión lógica podría ser que esta pregunta, buscar el Sentido de la Vida, ha permitido al ser humano enriquecer su experiencia.

Y si la Vida tiene un sentido, ¿qué sentido encierra el pretender alargarla de manera artificial hasta extremos insospechados? Esto viene al hilo de que el domingo 16 Francisco Ayala cumplió 102 años. Dieron la noticia en los telediarios nacionales y se hizo glosa de su persona. En esta misma semana, murió Arthur C. Clarke, a los 90 años de edad. ¿Cuál es la finalidad de llegar hasta esa avanzada edad? Esa fue la pregunta que mi mujer me hizo cuando comentábamos la primera noticia a la hora de la comida. Ciertamente, no conocemos el Sentido de la Vida (si es que lo tiene), pero pretendemos alargarla lo máximo posible… ¿para qué? En el caso de estos dos personajes, la finalidad de su vida, y por consiguiente, de la duración de la misma, es idéntica: ambos tienen algo que legar al conjunto de la Humanidad, su pensamiento, su imaginación, las historias que componen, los personajes que describen, en definitiva, su visión de nuestra sociedad en su conjunto.

Pero, ¿y los demás seres humanos?¿Qué tenemos que ofrecerle nosotros a la Sociedad?¿Qué es lo que justifica que existamos más allá del límite natural que nuestros genes permiten?¿Merecemos la mayoría de nosotros la pena? Creo que esta pregunta es realmente la que necesita una respuesta, dado que preguntarse por el sentido de nuestra vidadentro del infinito conjunto del Universo carece de sentido (irónicamente).

Este ha sido el primer apunte dentro de mi blog. Deseo con fuerza que mi cuaderno llegue a calar profundo en vosotros y que su lectura os inspire. Os animo a participar, escribiendo comentarios a estas notas, sugerencias, vuestras propias reflexiones… Lo que sea. Que el mar me traiga botellas y mensajes.


Respuestas

  1. Personalmente, soy de la opinión de que la Vida no tiene una razón de ser. Simplemente apareció y nos dio origen a nosotros, seres conscientes […]

    No podría estar más de acuerdo. Yo creo que no hay UN Sentido de la Vida, sino que cada persona da a su vida el sentido que quiere. Que no estemos aqui por ninguna razón en concreto no quiere decir que no podamos enfocar nuestra vida para, por ejemplo, calar de alguna forma en nuestra propia sociedad, para mejorarla o empeorarla, claro.

  2. Esa es otra conclusión a la que he llegado. La Vida tiene que tener una finalidad para tener una dirección, incluso sentido a un nivel personal. Si no, vagas a la deriva como un tronco en el río…

    Gracias por ser el primero!

  3. ¿No hago el primer comentario en tu primer post? Mierda, tendré que ser más rápido la próxima vez…
    En fin, el sentido de la vida, el universo y todo lo demás es, por si no lo sabes, 42. Eso de acuerdo con La Guía del Autoestopista Galáctico, libro que no recuerdo si has leído, pero que creo que sí te he recomendado.
    Yo por mi parte, estoy contigo, somos una especie de accidente y, por lo tanto, hay que tomárselo con alegría y con algún objetivo concreto. Si me preguntas el mío la respuesta es fácil. Ser feliz y hacer felices a los demás.
    Así que nada, aquí está tu primer post y aquí mi primer comentario amigo mío. Era natural que acabaras teniendo tu propio blog porque eres uno de mis comentaristas más activos y de largo te viene la afición a escribir. Por cierto, no descartes incluir algún relato…
    Mucha suerte en esta andadura. De momento ya tienes un suscriptor.

  4. Gracias Ponzonha. He estado bastante inactivo por motivos que ya comentaré, pero me hace mucha ilusión volver y ver que has escrito en esta primera página.
    No descarto meter alguna morralla de cosecha propia, pero me escama mucho la política de propiedad intelectual que tiene esta gente. En cualquier caso, prometo dar la talla aquí y en cualquier bitácora (esto es para mi hermano, especialmente) en la que escriba. 🙂

  5. Hombre, ¡Cómo no iba a reaccionar al revisar los comentarios y ver que tu nombre llevaba un link!
    Respecto a la política sobre propiedad intelectual: tu eres el único responsable de lo que se pone en el blog y wordpress.com no se hace responsable de nada (mientras no te salgas de las condiciones que imponen) así que yourself…

  6. Ciertamente, y como dice Ponzonha, el sentido de la vida es 42. Así, sin más ni más.
    Comparto la opinión de que somos producto de una casualidad biológica en un momento concreto del universo. Digamos que un accidente circunstancial, vaya.
    Y ahora yo pregunto ¿Y porqué tiene que tener sentido? Quiero decir, ¿no tenemos suficiente con vivirla? Creo que, en cuanto a si merecemos o no la pena, lo deben decir los demás. Eso sí, siempre dejaremos huella en alguien.

  7. Tabernero, ese era precisamente el sentido del post. La vida no tiene un sentido intrínseco porque es simplemente casual. Por tanto opino, y creo que vosotros tambien, que el sentido de una vida individual depende directamente de los deseos de su propietario.
    Creo que una vida dotada de un sentido avanza con mayor firmeza que aquella que no lo tiene, sintiéndose su dueño mucho más realizado.
    Muchas gracias por escribirme y espero verte a menudo por aquí.

  8. […] diminutos encarcelados en un lugar diminuto. Percibimos la vida como algo pequeño y carente de sentido; ¿acaso alguien se puede sentir realizado cuando todos los esfuerzos que realiza se diluyen como […]


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