La Iglesia Catódica

Tralará, tralará, qué semanita llevo, señora.

Excomunión es la «expulsión, temporal o permanente de una persona de una confesión religiosa«, según la Wikipedia. Las consecuencias de tamaño castigo eclesiástico son que el excomulgado deja de poder ir a misa y de participar en las demás ceremonias de la Iglesia (digo, igual los obispos reparten carteles por las diócesis con los caretos de los implicados, en plan Ministerio del Interior con los etarras, y tal). Las cosas que tiene la Historia; vean cómo los Reyes Católicos fueron excomulgados por casarse, siendo primos, sin una dispensa papal (comprable o, como demostraron los propios monarcas, falsificable, a fin de cuentas) y sin permiso del hermano de Isabel, el rey Enrique IV de Castilla.

Esto viene a que ayer, 18 de Junio de 2009, la Iglesia Catódica recordó a sus creyentes aforados la obligación moral de no votar a favor de la Ley de Plazos del Aborto en sesión plenaria y a la gleba que la comisión o facilitación de un aborto (aunque sea pequeñito) conlleva una sentencia de excomunión automática, es decir, latae sententiae. Varios de nuestros insignes políticos, entre los que se encuentran personas tan libres de sospecha como MariANO Rajoy (permítanme que me monde) o el respetable José Antonio Durán y Lleida, expresaron su intención de votar en negativo a la mencionada Ley, pero le vinieron a decir a la Iglesia Catódica que lo hacían porque querían, no porque se lo dijeran ellos (revisen el origen de su educación y descubrirán en el fondo las raíces de la Misionaria Protectiva).

Pero bueno, el tema que también quiero señalar es que vale, que muy bien, que la Iglesia Catódica tiene derecho a expresarse públicamente en los foros adecuados para ello (el saloncito que usa la Conferencia Episcopal es muy mono, sí, pero debe oler a rancio cada vez que salen Camino o Varela…) pero eso de amenazar con excomuniones… Hombre, también es lícito. Pero calculemos qué pasaría, demográficamente con los fieles de la Iglesia Catódica, si llevaran sus amenzas a término (que si no, luego pierden credibilidad).

Dice la Iglesia, y es un canon viejo, que el aborto, su comisión, de manera activa o pasiva, conlleva, como he dicho, la excomunión de la persona en cuestión. Esto implica a la mujer que aborta, al marido, padre/madre de la mujer (no consideraremos familiares más alejados) y un equipo médico que, al menos, debería incluir un obstetra, un anestesista y una enfermera (corríjanme los médicos si me equivoco). Consideremos que hay 3,25 médicos por cada mil españoles, o sea, por cada 500 mujeres (más o menos). Lógicamente, estos 3,25 médicos no son obstetras, pero para hacerlo más sangrante, supongamos que sí lo son. En el periodo de tiempo entre 1991 y 2007, 1.123.305 mujeres abortaron. Supongamos (absurdamente estadísticamente hablando) que cada mujer está atendida por un equipo de médicos diferente. Esto hace un total de 3.650.741 profesionales de la sanidad. Ahora, supongamos también que todas esas mujeres tienen o tuvieron pareja estable y progenitores que las apoyaron en su decisión. Este cálculo (absurdo) nos da un total de 3.369.915 personas. Sumando, obtenemos un (irreal) total de 8.143.961 personas que deberían estar excomulgadas a día de hoy, latae sententiae.

Y digo yo, ¿la Iglesia Catódica elimina de sus censos a los fieles excomulgados?. Y diga también, siendo la Iglesia Catódica tan rencorosa en estos temas como sabemos que es, ¿cuántos de estos excomulgados han sido reconciliados en el seno de la Santa etc.? Pero, sabiendo que hay unos 39,4 millones de españoles clasificados como catódicos. Sustrayendo de este total los excomunicados durante el periodo 1991-2007, la cifra se queda en, más o menos, 31,3 millones de españoles, lo cual sería un buen bajón. Al final, lógicamente y en un escenario totalmente irreal, los catódicos excomunicados acabarían por ser mayoría, etc.

Pero bueno, esto era un intento de post serio y al final, debido quizá a que me encuentro algo febril desde hace tres horas, me ha quedado un churro de mielllda. Bueno, que les cunda esta semana tan prolífica en cuanto a publicación. ¡Saludos!